miércoles, 10 de octubre de 2012

¿Equidad viene de Equino?


Ayer descubrí que bloguer guarda estadísticas de las visitas al blog. Así que las analicé cuidadosamente mirando por encima un poco.
Resulta que las 194 provenientes de España puedo imaginarme de quienes son: 4 de Willy, 5 de Somófrates y el resto de cada vez que abro el navegador con la pestaña del blog abierta. 

Las pocas de EEUU son del Repet, fijo. Muy Repetista todo.

Pero... ¿Y las 46 de Rusia?¿Les saldrá el blog en cirílico?Vale que el turismo ruso ha aumentado mucho en los últimos años. Pero no veo qué les puede interesar de la mierda ésta que escribimos. De todas formas, seguro que es culpa de Guillermo.

Da igual, lo realmente importante es que la mayoría que entra no entiende una palabra de lo que escribimos y de los otros cuatro, dos somos los autores y los otros dos ya saben lo gilipollas que somos los autores (lo que hacen cuatro que lo sabemos), así que voy a aprovechar para desahogarme a conciencia.

ATENCIÓN. DEJEN
SUS IDEALES EN EL GUARDARROPA ANTES DE ENTRAR. PUEDE CAUSAR NIVELES DE BILIS PELIGROSOS.

Asociaciones feministas, colectivos homosexuales, Grupos de personas con distintas concentraciones de melanina. Unidos por su característica principal. Porque como todo el mundo sabe, en el afán por sobresalir la característica distintiva es la principal.

Con la voz en un puño y el corazón a flor de piel te gritan consignas de que todos somos iguales. Pero como se te olvide que son distintos de ti, la has cagado.
-¿Lo importante es que sois distintos?
-¡No, todos somos personas! ¡Debemos ser iguales!
-Bien, me alegro.
-¡Claro como tú no eres Mujer/Gay/Negro (pero que se note la mayúscula), es fácil decirlo.
-¿En qué quedamos?

Y de repente alguien se da cuenta que ése de ahí no comparte la característica que les distingue (y que no debería ser motivo de discriminación) y hacen piña. Y tú que pasabas por ahí te encuentras un cartel colgado al cuello que viene a decir "cerdo –Machista-homófomo-racista-, eres el enemigo" y un montón de histéricos/as que te gritan que eres malo por tu sexo, condición sexual o color de tu piel. Y tú sólo querías pedir otra cervecita...
- No me discrimines por lo que soy, malvado. En vez de eso exijo un día de lo que sea que me haga diferente de ti y ya me discrimino yo solito.
 - ¿Y no sería mejor que te dejaras de zarandajas e intentaras normalizar lo que te "diferencia" en vez de sacarlo a colación cada vez que puedes?

 - ¡Jamás! Nunca en una sociedad dominada por gentes como tú. Además... ¿y si resulta que me aceptan como soy? Ya no podría quejarme porque me tratan diferente. Peor aún ya no podría sentirme especial por ser diferente.

Y me dirán los representantes más radicales de dichas asociaciones que me equivoco. Y puede que sí. Pero desde luego si gritas a los cielos y acusas a tus iguales de que te discriminan y cuando te aceptan, en vez de sentirte aceptado y olvidarte del tema, le das otra vuelta para poder seguir lloriqueando a gusto, lo que parece es que sólo buscas la atención que te proporciona.

Así que manejo el cotarro, tengo el poder y soy un discriminador opresor impenitente. Pues qué bien, entonces ¿por qué con tantas banderas enarboladas y tantos días de tantas cosas y tantas miradas atravesadas cuando se me ocurre saludar a un grupo con cierta característica que no comparto (desgraciadamente para mí, parece ser) me siento como si el discriminado fuera yo por ser un varón, blanco, heterosexual?


Ésa es otra, además, en un discurso bastante infantil se intercalan llantos sobre lo opresivo que es el sistema opresor y estamentos sobre la clara superioridad del grupo oprimido. Cuando, siendo superiores es estúpido ser el oprimido.

 Resulta que voy diciendo por ahí que las mujeres y los homosexuales y aquellos que no comparten mis rasgos raciales son inferiores por ser mujeres, homosexuales o por no compartir mis rasgos raciales. Nada más lejos de la verdad. Digo que sois inferiores por no ser yo. Y esto se aplica también a los hombres heterosexuales con mi mismo tono de piel.

Y a cada cual lo suyo y aunque no me acuerde de haberlo dicho nunca, si digo que vuestro rasgo distintivo os hace inferiores, pues por algo será, que no voy a estar equivocado yo. Dejad de dar la brasa y esperad los restos de mi opulenta mesa como buenos chicos que sois ¿a que sí?¿a que sí?¿quién es un buen chico?Túuu, tú eres un buen chico. O se los tiraré a los perros, que sí saben cual es su sitio, cojona.


Joder. Si soy el opresor por mi exceso de penes (uno de más), mis tendencias sexuales (que me guste mi pareja con menos penes que yo) o mi carencia de 5,6-dihidroxyndol-2 ácido carboxílico (aprende bioquímica), parad las llantinas y dejaos oprimir como los dioses mandan, que con tanto griterío no hay quien se concentre para hacer lo que se espera de uno. Que vuestra "lucha" ha durado cientos de años y miles han muerto para intentar igualarnos a todos, pero la falocracia racista y sexista se la han currado durante más de cien mil años y cientos de millones han muerto para mantenerla. Lo realmente equitativo es: Cuando igualéis números, hablamos.

Panda de desagradecidos.